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El viejo debate que reabre Koke

Cada vez que el Atlético de Madrid celebra un gol en el Metropolitano, el capitán Koke disfruta del momento como el que más. Sin embargo, recientemente el mediocampista sorprendió a sus seguidores con una confesión cargada de nostalgia. “¿Soy el único que echa de menos las redes rojiblancas?”, escribió en su cuenta de Instagram, mientras compartía un video de un antiguo partido del Atlético frente al Betis en el recordado Vicente Calderón.

El comentario de Koke despertó inmediatamente la complicidad de muchos hinchas colchoneros, que recordaron junto al capitán los años dorados vividos en el mítico estadio. Aquellas redes rojiblancas formaban parte de la identidad del club, un detalle que marcaba diferencia y evocaba la pasión de una época donde la estética del Calderón se fusionaba con la garra rojiblanca.

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El significado de las redes rojiblancas

El actual estadio del Atlético, el Metropolitano, al igual que la mayoría de los recintos de LaLiga, utiliza redes completamente blancas por una cuestión técnica: las transmisiones televisivas favorecen ese color para mejorar la visibilidad. Sin embargo, para muchos aficionados y para Koke, las redes rojiblancas eran un símbolo que conectaba directamente con la historia y el sentimiento atlético.

En el Calderón, las redes cambiaron varias veces de color. Llegaron a ser blancas, rojiblancas e incluso negras, como ocurrió en la temporada 2010-11. Fue en esa época cuando el equipo, con Simeone recién llegado al cargo, recuperó en febrero de 2012 las tradicionales redes rojiblancas, las mismas que acompañaron al club en el histórico Doblete de 1995-96 y en la conquista de la Liga de 2014.

Koke, símbolo de identidad y memoria rojiblanca

Con su publicación, Koke no solo expresó una nostalgia personal, sino también la de toda una generación que vivió los años gloriosos del Calderón. El capitán, que debutó en aquel estadio y se formó bajo su atmósfera única, reivindica el valor de los pequeños detalles que construyen la identidad de un club.

Mientras el Metropolitano sigue escribiendo nuevas páginas de gloria, las palabras de Koke recordaron a todos que el espíritu del Calderón sigue vivo en cada gol, en cada celebración y en cada corazón atlético que sueña con volver a ver ondear las redes rojiblancas.

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